Si tu ordenador es de sobremesa, no lo dejes en el suelo debajo de una mesa. Sitúalo encima, en algún lugar donde pueda ir cogiendo aire que no haya expulsado previamente. De esa manera, te aseguras que no hay un punto de acumulación de calor.Si tienes un portátil, no lo apoyes en una superficie blanda o deformable. Debe existir en todo momento un canal de evacuación del aire caliente, y si es posible, debes apoyar el portátil en una superficie fría o que pueda absorber calor (metálica).
Mantén tu ordenador limpio. Una de las principales causas del sobrecalentamiento de los ordenadores en verano es que los ventiladores no funcionan al 100% debido al polvo que van acumulando. Puedes comprar un spray de aire comprimido para desprender la capa de polvo de tus ventiladores.
Un PC ordenado es un PC bien ventilado. Si tienes un ordenador de sobremesa, evita que en el interior de la caja cuelguen cables sin ton ni son. Si los agrupas y ajustas a las paredes de la torre, mejorarás la circulación del aire en el interior del PC, mejorando consecuentemente la ventilación.
Ayúdate con accesorios. Existen opciones bastante económicas para portátiles (como una base de apoyo con ventiladores que funcionan a pilas) y para ordenadores de sobremesa (ventiladores de caja más potentes, canalizadores de aire) que mejoran sustancialmente el intercambio de calor de tu ordenador con el aire que le rodea.
Si utilizas un portátil siempre conectado a la corriente eléctrica, desmóntale la batería. Las baterías de ión Litio pierden capacidad por sobrecalentamiento, afectando el calor que desprenden a otros componentes del equipo.
