La compañía Rationalcraft presenta una ventana de doble puerta, Winscape, que presenta un paisaje virtual. En realidad son dos televisores de alta definición embebidos en dos marcos que simulan los de madera de una ventana auténtica. Estos monitores proyectan la escena escogida y permiten a su propietario cambiar el paisaje que se contempla. El propietario de Winscape, que costará unos 3.000 dólares, puede escoger un escenario ya filmado o grabar el suyo propio si lo hace ajustándose a una serie de requerimientos.
Gracias a un wiimote, la ventana detecta la posición de la persona. Eso sí, para logar que cuando la persona se mueva y acerque a la ventana ésta le ofrezca una imagen con la perspectiva adecuada del paisaje, ésta deberá ir equipada con un collar de infrarrojos, detalle que no deja de ser un grave inconveniente para la comodidad doméstica.
Utilizando el iPhone como un controlador remoto se pueden cambiar las escenas que presenta la ventana. En el catálogo de la compañía se ofrecen desde perspectivas urbanas a imágenes tomadas desde un tren en movimiento o paisajes submarinos que convierte la habitación en una especie de acuario. Un ordenador escondido procesa los datos.